Con una longitud de 4,644 m, en la parte frontal destaca la nueva firma lumínica de tres triángulos en los faros que van acompañados de funciones avanzadas como son los Matrix LED, que permiten conducir con las luces largas sin deslumbrar a los de delante. También tiene un importante impacto visual el logotipo Cupra iluminado, lo que permite identificar el vehículo fácilmente. Las entradas de aire delanteras, además de una función estética, tienen un diseño muy funcional para canalizar el flujo de aire y refrigerar las baterías.
Lateralmente, su aspecto musculoso y dinámico se ve potenciado por la línea en forma de cuña que encontramos desde el capó hasta el portón trasero. Todo ello favorecido por unas llantas muy originales que pueden ir desde las 19 a las 21» pero que además del efecto estético, tienen una utilidad práctica reduciendo turbulencias y obteniendo una mayor eficiencia.
Finalmente, la zaga del Tavascan mantiene el mismo espíritu con los tres triángulos y el logo Cupra iluminados que acentúan la sensación de solidez y amplitud. Una iluminación que también encontramos en los tiradores de las puertas y en la proyección en el suelo del anagrama de la marca.
«Espina dorsal»
Pero no solo en el exterior Cupra ha querido marcar diferencias con sus competidores, sino que en el interior también ha querido ser profundamente innovador. Y ello se aprecia en lo que denominan «espina dorsal», una pieza estructural sobre la que se construyen todos los restantes detalles y que define el carácter de los elementos flotantes. Se trata de un recurso escultórico que aporta sensación de ligereza y que, con su diseño de malla paramétrica 3D, fortalece su apariencia de espina y aporta ligereza estructural.
Otro elemento destacado es sin duda la pantalla central flotante de 15», la más grande montada nunca por la marca, que integra un control deslizante retroiluminado. No falta una nueva interfaz que permite un manejo más fácil e intuitivo. También resulta novedoso el diseño de las salidas de aire apenas visibles. Este espíritu deportivo que siempre transmite Cupra se ve reflejado en los asientos ya que de serie monta unos Bucket muy atractivos. Finalmente, no podemos dejar de hablar de la importancia que la firma española ha dado a la iluminación con la tecnología LED presente en todo el habitáculo, incluidos los paneles de las puertas delanteras y traseras, para agregar una luz ambiental.
Poder eléctrico
Pero sin duda, todo lo indicado hasta ahora de poco serviría si la firma española no hubiera equipado el Tavascan con unos propulsores que estén a la altura del comportamiento deportivo que su clientela espera de un SUV como este.
Así, la versión base incorpora un motor de tracción posterior que desarrolla 286 cv con un par de 545 nm. Su velocidad máxima está limitada a 180 km/h y tan solo necesita 6,8 segundos para acelerar de 0 a 100 km/h. Sin embargo, para los que quieren todavía más, Cupra ofrecerá la versión VZ, que va equipada con dos propulsores eléctricos, uno en cada eje, que ofrecen una potencia conjunta de 340 cv. El sistema es capaz de enviar hasta el 30 % del par a las ruedas delanteras cuando se necesita más motricidad. Por ello no debe extrañarnos que sea capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en apenas 5,5 segundos. Su velocidad punta también está limitada a 180 km/h. El conductor puede elegir entre seis tipos de conducción: Range, Comfort, Performance, Cupra, Individual y Traction.
Por lo que a la batería respecta, con una capacidad neta de 77 kW es capaz de ofrecer una autonomía de hasta 568 km en la versión Endurance, cifra que se reduce hasta los 522 en el VZ. El vehículo permite recuperar energía al levantar el pie del acelerador, pudiéndose gestionar a través de las levas de cambio regenerativas en el volante que incluyen tres niveles a elegir. En cuanto a la carga, dicha batería permite cargar hasta a 135 kWh, lo que conlleva pasar del 10 % al 80 % de capacidad en poco menos de media hora o conseguir 100 km adicionales en 7 minutos. En caso de un Wall Box casero, puede cargar hasta a 11 kWh.