El presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, afirmó ayer que su
gobierno no tiene previsto aplazar la entrada en vigor del decreto
que establece las cuotas de cine en catalán, pero «si hiciera
falta, lo haríamos» para facilitar la negociación con las
productoras norteamericanas.
«No lo retiraremos», aseguró Pujol, antes de señalar que no
descarta incluso la reforma de la Ley de Política Lingüística para
introducir las sanciones por el incumplimiento de las cuotas de
catalán en el cine, que el Tribunal Superior de Justicia de
Cataluña no ha permitido incluir en el decreto.
Sin embargo, Pujol quiso dejar claro que la Generalitat da
prioridad a la negociación con las grandes empresas productoras y
distribuidoras norteamericanas para que acepten las cuotas de
doblaje o subtitulación en catalán de sus filmes más
taquilleros.
«Si en el marco de esta negociación "añadió", que puede ser
larga y complicada, y atendiendo a razones de oportunidad, fuera
conveniente el aplazamiento (de la entrada en vigor del decreto),
lo haríamos, porque lo que importa es aumentar las cuotas de
catalán, que ahora son ínfimas».
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