La Infanta Cristina se encuentra bien.

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BARCELONA. EFE. La Infanta Cristina alumbró felizmente a su primer hijo en la madrugada de hoy en Barcelona, un niño que es el segundo nieto de los Reyes de España y que se llamará Juan. «Es hermoso, rubio, y no sé dar mÀs datos ahora», dijo a los periodistas a las tres y media de la mañana un emocionado y satisfecho Iñaki Urdangarín, que asistió, e incluso ayudó, al parto de su primogénito.

El pequeño Juan, según el doctor Manuel García Valdecasas, que encabezó el equipo que atendió a la Infanta, es un bebé que pesó cuatro kilos y treinta gramos y midió al nacer 53 centímetros. «Un bebé precioso», apostilló el médico. El Duque de Palma de Mallorca anunció que el pequeño será bautizado, con toda probabilidad, en Madrid antes de Navidad, en una fecha por determinar, y sus padrinos serán sus tíos la Infanta Elena y Mikel Urdangarín.

Con el escueto nombre de Juan, que el feliz padre dijo que a la pareja les parece «solemne y bonito», ambos han querido recordar a las figuras del Conde de Barcelona, bisabuelo de la criatura, y a sus abuelos, el Rey Juan Carlos y Juan Maria Urdangarín. Ver nacer al niño fue para el Duque de Palma una experiencia «indescriptible que nos ha cambiado la vida por completo en diez minutos». Juan Urdangarín de Borbón ocupa desde hoy el quinto puesto en la línea sucesoria de la Corona, y, por el Real decreto que regula los títulos y tratamiento de la Familia Real, será grande de España y tendrá tratamiento de «excelencia», aunque no tiene título nobiliario por el momento.

El niño es el segundo integrante, después de su primo Felipe Juan, de la undécima generación de la Casa de Borbón en España, una dinastía que se inició hace tres siglos con el rey Felipe V. La Reina, que se encontraba hoy en París asistiendo a una gala de ballet acompañada por el esposa del Presidente Jacques Chirac, llegó a la clínica Teknon a las 12.40, una hora antes de que se iniciara el alumbramiento, que se produjo finalmente a las 02.10. Doña Sofía también estuvo presente en la sala de partos.

El Rey, en Madrid, al igual que las familias de los Duques de Lugo, estuvieron informados en todo momento del desarrollo del nacimiento. Don Juan Carlos no podrá venir a Barcelona hasta el mediodía de hoy, después de asistir a un acto castrense en la localidad madrileña de Villaverde, al igual que la futura madrina, la Infanta Elena, que tiene un compromiso oficial en Sevilla. El doctor García Valdecasas, en su comparecencia ante los medios de comunicación, dijo que el parto se ha producido justo al cumplirse las cuarenta semanas de gestación, cuando Doña Cristina ya «estaba cumplida».