Un niño de cinco años, superviviente de un naufragio donde murieron
diez balseros cubanos, incluida su madre, es el centro de una
disputa internacional entre La Habana y Washington por su custodia.
Mientras que las autoridades cubanas exigen a Estados Unidos la
devolución del menor Elían González a petición de su padre, Juan
Miguel González Quintana, alegando que su hijo fue traído
ilegalmente a este país por su madre, sus familiares en Miami
advirtieron de que no permitirán su regreso a la isla.
El niño forma parte de un grupo de 13 balseros cubanos que la
semana pasada intentó llegar a Estados Unidos en una embarcación de
unos cinco metros de eslora que zozobró pocos antes de alcanzar la
costa de Florida.
«En correspondencia con esa petición personal (del padre), el
Ministerio de Relaciones Exteriores (MINREX) ha iniciado los
trámites oficiales a través de la Sección de Intereses de EEUU en
nuestro país a fin de que el niño secuestrado sea devuelto cuanto
antes a su padre», señala un nota de La Habana.
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