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El duque de Lugo, Jaime de Marichalar, sigue una evolución favorable, después de que el pasado sábado sufriera un infarto cerebral, y ya ha comenzado a realizar ejercicios de rehabilitación pasiva, según informaron ayer tarde los miembros del equipo médico que le atiende en el Hospital Gregorio Marañón de Madrid.

Pese a que la recuperación es lenta, los médicos consideran que si en las próximas 24 o 48 horas el paciente sigue estabilizado, podrá salir de la unidad de cuidados intensivos (UCI) y ser trasladado a planta, donde «lo habitual» en estos casos es una estancia de unas tres semanas.

El doctor José Eugenio Guerrero, jefe del Servicio de Cuidados Intensivos del Hospital Gregorio Marañón de Madrid, explicó que la rehabilitación pasiva consiste en la realización de ejercicios para mover la masa muscular y las articulaciones siempre ayudado por un rehabilitador o fisioterapeuta. Estos movimientos son necesarios para evitar que las articulaciones se anquilosen. Respecto al habla, el duque de Lugo se expresa para poder entenderle, pero no presenta un habla perfecta.