El Consejo de Gobierno de la Junta durante la reunión en la que dio el visto bueno a la medida.

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OTR/PRESS-SEVILLA El consejero de Salud de la Junta de Andalucía, Francisco Vallejo, anunció ayer que el Gobierno autonómico presentará mañana la primera de una serie de demandas contra las tabaqueras Altadis-Tabacalera, Philip Morris, Browns Williams, JT Internacional y CITA, convirtiéndose así en la primera administración de la UE que presenta una demanda contra las tabaqueras. La Junta asegura tener «datos irrefutables» que demuestran que los cigarrillos tienen componentes adictivos no declarados en los envases.

El responsable andaluz de Salud explicó que el objetivo principal de la demanda «no es conseguir una cantidad concreta de dinero», sino que se declare la relación causa-efecto entre el consumo de tabaco y la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), infarto de miocardio y cáncer de pulmón. La demanda incluirá los historiales clínicos de 300 pacientes diagnosticados con algunas de estas patologías, que son atendidos actualmente en los hospitales Virgen del Rocío y Virgen Macarena de Sevilla.

Asimismo, en la reclamación de responsabilidad civil, la Junta pretende determinar que las tabaqueras son responsables de ese daño y conseguir el derecho a la indemnización a la sanidad pública por el coste derivado de los efectos del tabaco. Actualmente se continúa valorando dicho coste «en unos 300 millones de euros, en el último año». Además de los datos clínicos, la Junta presentará los datos analíticos de la composición de los cigarrillos de todas las marcas de las compañías demandadas. Sobre este particular, Vallejo manifestó que se han conseguido «datos irrefutables» de que, además de los componentes declarados por las tabaqueras, «existen otros no declarados, que actúan con la nicotina y constituyen un poder de adicción mucho mayor que los límites establecidos en las directivas europeas».

La demanda se presenta después de que las tabaqueras rechazaran negociar con la Junta para llegar a un acuerdo respecto a la participación de éstas en el gasto sanitario. Sin embargo, Vallejo insistió en que la posibilidad de negociación con las tabaqueras «sigue abierta» y manifestó su esperanza en que se alcance un acuerdo entre las dos partes antes de que finalice el proceso judicial. El Comité Nacional para la Prevención del Tabaquismo cree que la demanda contra las industrias tabaqueras «es seria, rigurosa y se basa en estudios pormenorizados, detenidos y rigurosos, de los costes que suponen los tratamientos contra el tabaquismo».