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Varios miembros de la asociación «SOS papá», formada por padres separados que piden la custodia compartida de sus hijos, intentaron ayer, enfrente del Congreso de los Diputados, quemarse a lo bonzo, protegidos con trajes ignífugos.

La policía, que se encontraba en la plaza de las Cortes, impidió esta parte de la protesta y, tras llamar a un coche de refuerzo, les retiró la gasolina y parte de los trajes, fundamentalmente capuchas y guantes, que los concentrados llevaban para defenderse del fuego.

Los manifestantes, media docena de hombres y algunas mujeres, desplegaron una gran pancarta en la que se leía «Nuestros hijos maltratados y secuestrados impunemente por el Estado. Basta Ya. Custodia compartida».

El presidente de la asociación, Alejandro Urcera, explicó en declaraciones a los periodistas la situación por la que atraviesan muchos de los padres separados y con hijos, que son «discriminados con sentencias que benefician siempre a las madres».