TW
0

Esta madrugada, los relojes deberán retrasarse una hora y así, a las 3.00 horas deberán marcar las 2.00 horas, para adaptarse al horario de invierno que exige la directiva comunitaria. Este horario estará en vigor hasta el último domingo del mes de marzo. La norma europea señala que este cambio de hora tiene carácter indefinido, ya que el «buen funcionamiento de algunos sectores, no sólo el de los transportes y las comunicaciones, sino también otros ramos de la industria, requiere una programación estable a largo plazo».

Un estudio realizado por la consultora Research Voor Beleid destaca los beneficios del cambio de hora, ya que además del ahorro energético, los atardeceres son más largos y se fomenta así el deporte y otras actividades al aire libre. El Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE) estima que el ahorro en iluminación en el sector doméstico alcanza el 5%.