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Un juez de Barcelona ha condenado a un hombre a pagar una multa de 8.640 euros por abusar sexualmente de su hija de cuatro años aprovechando un fin de semana que tenía a su cargo a la menor, tras haberse separado de su esposa.

La sentencia ha denegado por contra la indemnización solicitada por la abogada de la madre de la niña, porque la menor «no sufrió secuelas» y «está normal» y tampoco ha quedado probado que la madre «haya tenido gastos por ello».

Durante el juicio, el magistrado proporcionó un muñeco a la menor en su declaración, que realizó protegida de su padre, para que pudiera señalizar las partes de la anatomía en las que sufrió los tocamientos.

El titular del Juzgado de lo Penal número 12 de Barcelona considera probado que en julio de 1998, el procesado, Juan Ramón F.B., de 36 años de edad, realizó tocamientos en la zona vaginal de su hija durante uno de los fines de semana que la tenía a su cargo, después de haberse separado de su esposa.

El acusado y la madre de la menor habían llegado a un acuerdo sobre las horas que él se encargaría del cuidado de la niña.