Al igual que ocurriera la semana pasada, el nerviosismo que se
produjo entre los componentes de la expedición al salirles al paso
una patrullera del instituto armado, que les llevó a moverse
desordenadamente y provocar que la barca donde viajaban volcara,
fue el desencadenante del suceso, relataron.
El último naufragio tuvo lugar, según informaron fuentes de la
Guardia Civil, sobre la una y media de la pasada madrugada y a sólo
800 metros de la costa del municipio de Tuineje.
Las fuentes precisaron que el naufragio ocurrió cuando los
agentes habían comenzado a izar a la patrullera a los inmigrantes,
que, debido a que su patera tenía una vía de agua que les hacía
temer que se hundiera, comenzaron a ponerse de pie y moverse
desesperadamente, provocando el vuelco.
Como consecuencia del accidente -agregaron- cayeron al agua
todos los integrantes del grupo salvo tres: uno que había sido
izado ya a la patrullera y dos más que lograron asirse a aquella al
hundirse su barca.
Los guardias civiles lanzaron entonces al agua varios chalecos
salvavidas y su lancha auxiliar, desde la que consiguieron rescatar
a otras trece personas y se encontraban desaparecidas otras nueve,
ya que en la patera viajaban en total veinticinco, de acuerdo con
los testimonios de sus propios ocupantes.
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