La Comisión Europea (CE) abrió ayer un proceso de consulta
pública sobre la posible implantación de una línea de teléfono
única donde cancelar, desde cualquier país de la UE, las tarjetas
de crédito y de pago que se extravíen o sean robadas.
El Ejecutivo comunitario considera que el sistema actual, en el
que en un mismo Estado conviven diferentes teléfonos de anulación,
no beneficia la eficiencia del sistema y aumenta el riesgo de
errores, particularmente cuando el usuario se encuentra en el
extranjero. Frente a ello, propone crear una línea única con un
número fácilmente recordable que permita al cliente contactar con
su banco desde cualquier punto de la Unión.
«Estamos trabajando para crear en la UE un mercado financiero
único. Además de mejorar la seguridad de los pagos electrónicos,
debemos explorar fórmulas que hagan más eficiente la notificación
de pérdidas y robos de tarjetas», declaró el comisario europeo de
Mercado Interior, Frits Bolkestein.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.