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AGENCIAS-SANTA MARÍA
Michael Jackson volvió ayer martes según lo previsto al tribunal de California que lo juzga después de haber sufrido una especie de gripe que obligó a suspender durante una semana el juicio en el que se le acusa de abuso de menores.

La estrella del pop, de 46 años, enfermó de camino al tribunal de Santa María, a unos 30 minutos en coche desde su rancho de Neverland, por lo que fue conducido de inmediato a un hospital local. La súbita enfermedad cogió por sorpresa a los propios abogados de Jackson, que estaban en el tribunal preparados para proceder a la selección del jurado, y al juez de la Corte Suprema Rodney Melville, que dialogó con los médicos antes de enviar a casa durante una semana a más de 100 candidatos a formar parte del jurado. El retraso provocó las quejas de algunos de los aspirantes a miembros del jurado, que han sido convocados al tribunal solamente cuatro días desde que comenzase la selección, el 31 de enero.

Jackson recibió suero en el Marian Medical Center de Santa María debido a lo que el doctor Chuck Merrill describió como «una enfermedad parecida a la gripe con algunos vómitos» antes de que el cantante fuese dado de alta al día siguiente. Jackson está acusado de haber abusado de un niño de 13 años en su rancho de Neverland y de haber conspirado para cometer secuestro infantil, detención ilegal y extorsión.