El Pabelló Menorca, ubicado en Maó, acogió ayer la XIX Trobada de
Persones Grans de Menorca.
El acto, que comenzó a partir de las cinco de la tarde y
finalizó pasadas las nueve de la noche, contó con un total de 1.550
asistentes.
El evento comenzó con el discurso del presidente de la
Federación de Asociaciones de Personas Mayores de Menorca, Lidio
Ametller, que apuntó que «hablamos de una convocatoria que cada vez
cuenta con más gente y en la que hay puesta mucha ilusión».
Ametller realizó un llamamiento «a la gran familia de la tercera
edad de Menorca para que se comporte como tal».
Por su parte, el alcalde de Maó, Arturo Bagur explicó que «es un
orgullo que sea precisamente este colectivo el primero que utilice
el pabellón para un encuentro de estas características, apoyar a
nuestros mayores es una obligación para todas las instituciones
públicas».
Por su parte, la presidenta del Consell, Joana Barceló, comunicó
que «contar con este encuentro cada año es un placer, desde el
Consell reafirmamos nuestro compromiso de trabajar para nuestros
ciudadanos de la tercera edad, hablamos de gente que lo ha dado
todo en esta vida».
Orquesta
La presidenta prometió a los más de 1.500 asistentes que la XX
edición del encuentro contará con la contratación de una orquesta
musical.
Tras los parlamentos, Ameller entregó varios premios a los
presidentes de las siete asociaciones de personas mayores de
Menorca presentes en el acto.
Acto seguido llegó el turno para la música, con una actuación de
la soprano Xisca Caules, acompañada al piano por Cristóbal
Torrent.
El espectáculo continuó con el folklore del grupo la Rosa dels
Vents y tras una suculenta bereneta, a base de bollería menorquina,
fue la Casa de Andalucía la encargada de cerrar el acto con una
completa y muy aplaudida actuación que tuvo el flamenco de pura
raza como eje central.
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