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EFE-ROMA
Los actores Tom Cruise y Katie Holmes se casaron ayer por la tarde en el castillo Odescalchi, de Bracciano, a 35 kilómetros al norte de Roma, en una boda de fábula, entre pajes que ondeaban banderas, antorchas, flores blancas y rodeados de sus amigos, muchos de ellos famosos cantantes y actores de Hollywood.

Estaba previsto que la ceremonia comenzara a las seis de la tarde local (17.00 GMT), según los medios locales, entre ellos la televisión por satélite SkyTG24, que desplazó un equipo ante el castillo y transmitiendo en directo todo lo que pudo, que se reduce a la llegada de automóviles de gran cilindrada, oscuros, con los novios, familiares e invitados.

La ceremonia, que se desarrolló por el rito de la Iglesia de la Cienciología, a la que pertenece la pareja, se celebró en el interior del castillo en medio de fuertes medidas de seguridad.

De la pareja, Katie Holmes llegó primero, con la hija de ambos, Suri. A media tarde llegó al castillo Tom Cruise.