Se cumplen 54 años del primer cómic de Spider-Man publicado en el número 15 de la revista Amazing Fantasy un 15 de agosto de 1962.
El superhéroe de ficción, creado por Stan Lee y Steven Ditko, fue concebido como un huérfano criado por sus tíos Ben y May y que en la adolescencia debe, no sólo lidiar con los problemas propios de las edad, sino con los superpoderes y su sentido arácnido gracias a una casual picadura del susudicho invertebrado.
La aparición de Spider-Man revoluciona en cierta manera la concepción que hasta entonces existía de los adolescentes en los cómics, que no eran más que ayudantes o compañeros del principal personaje.
Lee y Ditko deciden que sea un estudiante adolescente el héroe de sus historias y Peter Parker será el nombre que durante generaciones seguirá unido al hombre araña.
Las historietas, publicadas por Marvel obtienen éxito rápidamente. El estudiante listo y a menudo víctima del abuso de otros, unido a su espíritu bondadoso suscita en el lector un sentimiento de compasión y empatía, que era precisamente lo que querían provocar sus creadores.
Spider-Man no es protegido como otros adolescentes pupilos de héroes, como en el caso de Robin con Batman o en de Bucky Barnes, pupilo del capitán América.
Peter Parker evoluciona en sus historias y en su personalidad: no sólo en perfeccionar poderes, su elasticidad o las telas de araña, sino en utilizar sus sentidos hiperdesarrollados. Peter Parker avanza y crece como adolescente y personaje a lo largo de los años, teniendo siempre presente la frase que le dijo su tío Ben antes de fallecer: «un gran poder conlleva una gran responsabilidad».
Parker pasa de ser un tímido adolescente a un adulto (ya en los años 2.000), que no puede desarrollar su amplia capacidad intelectual por su dedicación a combatir el crimen desde su personaje de Spider-Man.
Desde hace 54 años Marvel ha incluido a Spider-Man en varias series de cómics e incluso las ha tenido propias, siendo la más importante «The Amazing Spider-Man».
Es, sin duda, uno de los superhéroes más carismáticos, populares y comerciales; objeto de series de dibujos animados y de películas de grandes productoras con elevadísimos presupuestos.
Es conocido como la insignia de Marvel y su personaje sigue teniendo «tirón» comercial. Ya a los pocos meses del debut de Spider-Man en el número 15 de la revista «Amazin Fantasy» ; su director, Martin Goldman pudo comprobar que las ventas habían sido espectaculares y ordenó a Lee una colección propia del recién nacido héroe.
Steve Ditko se mantendría como dibujante de la serie hasta el número 38, que abandona por diferencias creativas con Lee. Es sustituido por John Romita, quien dota a Spider-Man de un aire más romántico, seductor y musculoso. Romita modifica también el personaje secundario que se convierte en el gran amor de Peter Parker, Mary Jane Watson.
Durante generaciones varios creadores han ido tomando las riendas del personaje hasta el comienzo del nuevo siglo cuando Joe Quesada, nuevo director editorial de Marvel, intenta devolver el esplendor que ha ido perdiendo con los años. Llega Straczyynski y, aunque es criticado por los «tradicionalistas» pronto comienzan a subir las ventas (se triplicó la tirada original). En diciembre de 2003 vería la luz el histórico número 500 y la colección ha seguido esa numeración desde entonces.
El eterno adolescente ya se ha hecho adulto y este miércoles festeja nada menos que 54 años de su primera aparición y del comienzo de la leyenda de su personaje.
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