Guillem Garí, propietario del restaurante El Cruce, explica que los caracoles se van cocinando en tandas de diez ollas de 70 kilos cada una. | Juanjo Roig

TW
15

Cualquier cifra que se de sobre la preparación que el restaurante El Cruce de Vilafranca está llevando a cabo para servir este miércoles caracoles con motivo de la festividad de Sant Marc es desbordante. Guillem Garí, propietario del conocido establecimiento, explica que en esta ocasión cocinarán más de 4.000 kilos de caracoles que se servirán durante la jornada, «aunque de lunes a viernes, lo que podríamos denominar la semana de Sant Marc, alcanzaremos los 6.000 kilos».

Como es habitual en la última década, El Cruce será un constante goteo de clientes que optan por probar los caracoles en el mismo local o por llevárselos a casa. Estos últimos son amplia mayoría pues «mañana serviremos unas 2.000 raciones en el restaurante mientras que otras 10.000 serán para las personas que vienen a buscarlos para comer en su casa», relata Guillem Garí. Para ellos se prepararan unos cómodos envases de diferentes tamaños y además se acompañan con una buena ración de all i oli. No en vano, El Cruce elaborará «cerca de 800 kilos de all i oli para suministrar a nuestros clientes durante la festividad de Sant Marc».

La cantidad no está reñida con la calidad y la receta de los caracoles de El Cruce contiene ingredientes como butifarrón, longaniza, pollo, panceta, costilleja, manitas de cerdo, carne magra y varias hierbas (hinojo, laurel y cebollino). Todo ello cocinado como mandan los cánones tradicionales mallorquines.

Para hacer frente a la gran demanda se usarán ollas con capacidad para 70 kilos de caracoles que se cocinarán en tandas de 10 en 10. Garí comenta que «nadie pase pena por quedarse sin caracoles. Habrá para todos».

Algunos previsores ya han acudido estos días al restaurante para hacerse con una buena ración de caracoles. Es el caso del grupo de trabajadores en activo y jubilados de AENA que, acompañados con la guitarra de Paco Sánchez, visitaron este lunes El Cruce para merendar de caracoles y otras especialidades del restaurante y, de paso, llevarse un buen recipiente para casa. Otros adelantaron la tradición, Ana Maria Gómez y su hijo Francisco Javier de Vega dieron cuenta de una buena ración del plato protagonista de mañana.