Entre fogones está el personal del restaurante El Cruce de Vilafranca, que se ha convertido en un lugar de culto para los que quieren ser fieles a esta tradición. El propietario del establecimiento, Guillem Garí, conoce al dedillo la elaboración de una receta que desde hace años satisface a los paladares más exigentes.
Kilos
Este año se han preparado para este miércoles y jueves unos 5.000 kilos de caracoles, que suponen entre 13.000 y 14.000 raciones. Una gran parte de éstas (entre 8.000 y 9.000), según explicó Garí se las llevan para comer en casa. Y para dar salida a todos estos kilos también cuentan con todo el instrumental necesario. Así lo explicó el propietario del restaurante El Cruce. «Tenemos varias ollas en marcha y en cada una de ellas se cocinan alrededor de 70 kilos». Y es que el restaurante tiene ya la medida tomada después de tantos años de experiencia y éxitos. Y para dar con el punto exacto, según cuenta Garí, «los caracoles necesitan unas cinco horas de cocción». En Sant Marc, el jueves, el restaurante abrirá sus puertas de las 6 de la mañana hasta las 12 horas de la noche. «El horario es muy amplio para poder satisfacer a todos los clientes».
Hasta Vilafranca estos días harán ruta centenares de personas de toda Mallorca para hacerse con un recipiente de caracoles. Ni más ni menos que cinco personas estarán dedicadas a llenar estos envases para los que deseen llevarse las raciones.
Guillem Garí reveló cuáles son los ingredientes para conseguir una receta potente: «Que los caracoles llevan herbes, botifarró, llonganissa, panxeta, costella, gallina y carn magre».
El reputado restaurador comentó que «cada día sube el consumo de estos moluscos; sobre todo, en la festividad de Sant Marc, y es que seguimos la tradición de nuestros abuelos. Ellos decían que qui menja caragols per Sant Marc no está tocat».
En cuestión de salud hay que ser cautos y hacer caso a lo que cuenta la sabiduría popular por aquello de que más vale prevenir que curar.