La imagen de la virgen fue engalanada en una tradicional procesión que no pudo parar en el Club Nàutic de es Molinar por las obras. | Teresa Ayuga

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Este domingo, a partir de las 20.00 horas, se ha celebrado la Procesión Marítima Verge del Remei, muy tradicional en la barriada de es Molinar, a la que sus pescadores se encomendaban en sus salidas a la mar.

A hombros, la imagen de la virgen, engalanada para la ocasión, fue trasladada desde la iglesia parroquial hasta el Club Nàutic Portixol –en años anteriores, la primera parada la hacía en el Club de es Molinar, que por obras está cerrado– donde embarcó.

La Verge llegó a este punto acompañada por las directivas de ambos clubes y por miembros de la Cofradía de es Molinar y de la Agrupación Nuestra Señora de la Esperanza, así como de numerosos vecinos. Una vez a bordo en uno de los barcos del club, así como también a bordo los que tenían que acompañarla, hizo una breve singladura de no más de treinta minutos, para regresar al punto de partida. De no haber estado en obras el otro club, hubiera llegado a éste.

Es costumbre que, al regreso, la Virgen fuera transportada por mujeres, pero como este año la vuelta ha sido en el punto de partida, el Club Nàutic Portixol, que está a bastante distancia del centro parroquial, el traslado de la imagen se ha hecho a hombros de hombres y de mujeres.

La novedad de este año ha sido que a los pies de la imagen se han depositado alimentos para donar a los vecinos de la barriada más desfavorecidos.