‘Invisibles', una exposición que hay que ver l El domingo es el Día del soltero      

Aparte del taller de fotografía, que ha dado lugar a esta exposición, los residentes de ambos llars asisten también a talleres de compasión, de música clásica –dirigidos por músicos, algunos de gran prestigio internacional– y de los 80. También participan    en labores agrícolas en el huerto que tienen. Y algunos domingos tienen la posibilidad de asistir a conciertos de música que se celebran en dichos llars, a cargo de músicos que actúan gratuitamente; entre ellos, músicos de la calle, que se sienten bien pagados viendo lo felices que hacen a estas personas. Para muchos de los que viven en ambos llars, antes de que pudieran entrar en ellos, la calle era su casa… Y vivían en ella en unas condiciones que nada tienen que ver con las de ahora, con tres comidas diarias que les llegan a través del comedor Tardor, habitación, aire acondicionado, duchas, servicio de lavandería, salas para estar, leer, realizar actividades y recibir visitas. Es más, en el Llar Inge, ubicado en General Riera, viven madres sin recursos económicos con sus hijos pequeños.

Todos están invitados

Pues dar visibilidad a todo esto es lo que han pretendido –y pensamos que lo han conseguido– estos 200 artistas, quienes, posiblemente, no habían utilizado nunca una máquina de fotografiar hasta que en los llars conocieron a Vicente Galaso. Y si lo habían hecho, jamás pudieron imaginar que algún día conseguirían fotografías como las que veremos, en las que, además, puede que, a través de ellas, hasta descubramos la esencia de sus autores. Nos cuenta Ascen Sala Barquiel, de la Fundación Tardor, que han invitado, muy especialmente, a la inauguración de esta exposición fotográfica al alcalde de Palma, José Hila, y a los regidores Antoni Noguera y Neus Truyols, a la vez que a la ciudadanía en general, pues los trabajos expuestos, sobre todo por su contenido y el objetivo que a través de ellos se pretende, vale la pena verlos, porque en esta exposición trascienden emociones de personas que han encontrado una segunda oportunidad en sus vidas.

Un tardeo especial

El próximo domingo, 13 de febrero, víspera del Día de los Enamorados, se celebra el Día del soltero y la soltera. Es una fiesta a nivel internacional. Por tanto, amigo/a, si lo eres, ¡enhorabuena! Ese es tu día. Al recordar la efemérides, nos viene a la mente una persona que tiene que ver mucho con ese día. O más exactamente, con los solteros que buscan encontrar su media naranja. Nos referimos a Laura Mojer, fundadora de la empresa vínQulo, dedicada a ese menester, que nos cuenta que para ese día han organizado un evento, un tardeo, en Social Club,    «al que podrán asistir parejas, y también solteros y solteras. Eso sí –aclara–, las personas que tengan pareja podrán llevar una etiqueta en la que se lea algo así como ‘No estoy disponible'. Y en lo que respecta a solteros y solteras, sin compromiso, les invitaremos a que busquen entre la asistencia a una posible pareja, también mediante etiquetas que les pondremos, y que digan ‘Estoy soltero'. Con todo eso, será un tardeo divertido. Y si encima entre ellos hablan y conocen a gente nueva... Pues ya ni te cuento». ¿Qué puede pasar si alguno/a de los asistentes solteros se interesan por los servicios de vínQulo?, preguntamos a Laura.  «Pues los interesados, ya sea para ser clientes, o para solo inscribirse gratuitamente en nuestra base de datos, deberán rellenar unos cuestionarios y también les entrevistamos. Y si deciden ser clientes, quedamos para días después a fin de conocerles mejor».

Cómo asistir

Recordando lo que Laura nos contó sobre vínQulo en la anterior entrevista, «una vez que hemos encontrado a dos personas que entendemos que pueden mantener una relación estable y duradera, hablamos por separado con ambas, diciéndoles que tal vez tenemos a quien andaban    buscando, preguntándoles si desean conocerse. En el caso de que acepten, los citamos a ambos en un lugar concreto, al que yo asisto solo y exclusivamente para presentarlos. Estoy con ellos cinco minutos, como mucho. Porque una vez hechas las presentaciones los dejo… Con dos condiciones: que no queden para una segunda cita, ni se intercambien los teléfonos. Porque –les digo– yo les llamaré. Y si ambos desean una segunda cita, yo les pondré en contacto de nuevo, y a partir de ahí, pueden llamarse y quedar, con el deseo por nuestra parte de que sea el comienzo de una relación duradera».

Volviendo al tardeo del domingo, además de copas y encuentros, habrá otras sorpresas, como juegos de magia y rifas. En cuanto a cómo conseguir la entrada, que incluye una consumición, puede hacerse a través de www.vinqulo.com,   y…¡Ojo!, las primera 50 entradas cuestan 10 euros, las siguientes, 15, y en la puerta, 20. La fiesta dará comienzo a las 17.00 horas y finalizará a las 22.00 horas.