Ya sea por motivos ecológicos o por las cada vez mayores restricciones al tráfico rodado, muchos han optado o se están planteando abandonar el coche y pasarse a medios de transporte urbano alternativos. El patinete eléctrico se ha convertido en una de las opciones preferidas de muchos para moverse por la ciudad. Sin embargo, otros tantos se muestran reticentes a modernizarse y se decantan por alternativas más tradicionales, como la bicicleta. Para aquellos indecisos, estas son algunos detalles a tener en cuenta a la hora de elegir entre ambos medios de transporte.
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La autonomía: el patinete eléctrico está condicionado por su batería. Una vez esta se acabe, el vehículo deja de funcionar, mientras que la bicicleta aguantará lo que las fuerza del ciclista. Si se quiere recorrer una distancia mínimamente extensa, mejor será recurrir a la bicicleta para evitar quedarnos tirados.
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La versatilidad: el patinete es perfecto para ir por ciudad, pero si se tienen que transitar caminos poco o mal asfaltados, puede dar problemas. En cambio, la bicicleta, aunque sea urbana, muestra una mayor resistencia a distintos tipos de suelo. Por otro lado, si nos fijamos en la portabilidad, el patinete se convierte en la mejor opción, al poderse plegar y transportar mucho más fácilmente.
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La velocidad: en términos de velocidad, ambos vehículos quedan empatados. El patinete está limitado a 25/km, mientras que las bicicletas están sujetas a la velocidad máxima de cada vía que, en ciudad, suele ser de entre 20km/h y 30km/.
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El mantenimiento y vida útil: el precio que se está dispuesto a pagar por el mantenimiento del vehículo y cuánto esperamos que nos dure debería de ser una de las claves de nuestra elección. Por lo general, al ir propulsados por un sistema eléctrico, es probable que a la larga -en unos dos o tres años- el patinete eléctrico acabe sufriendo averías que nos hagan pasar por el mecánico. Si se lleva un buen mantenimiento, puede llegar a alcanzar entre 7 y 10 años. En cuanto a las bicis, las reparaciones suelen ser, por lo general, menos costosas y, al no depender de un sistema eléctrico, su vida útil se verá sujeta en mayor medida al buen (o mal) uso que se haga de ella.
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El precio: este factor suele ser uno de los determinantes, aunque la ventana de precios es enorme, según sus características. En cuanto a patinetes eléctricos, los más básicos rondan los 200 euros, aunque pueden llegar hasta los 3.000. Por su parte, una bici urbana parte desde los 150 euros. Además de ello, hay que incluir el precio de la electricidad que se necesita para cargar el patinete.
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La salud vs la comodidad: quienes quieran ejercitarse, la mejor opción, sin duda alguna, es la bicicleta. Pedalear durante una hora al día ayuda a reforzar el sistema inmunológico, fortalece las articulaciones y quema unas 500 calorías entre otros beneficios para la salud. En contraposición, si lo que se busca es una mayor comodidad en los desplazamientos, el patinete se alza como vencedor.
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La seguridad: tanto la bicicleta como el patinete son en la vía usuarios vulnerables, propensos a sufrir impactos de otros vehículos más grandes. En Palma, de 2019 a 2020, los accidentes con patinete eléctrico se duplicaron, pasando de 94 a 143. Obligados a elegir entre ambos, cabe señalar que la bicicleta aporta mayor estabilidad y, por ende, menor riesgo de caídas para el conductor.
Además de estos aspectos, cabe tener en cuenta que los patinetes eléctricos son considerados Vehículos de Movilidad Personal o «VMP», por lo que se rigen bajo la normativa de la DGT para este tipo de vehículos. Además, cada municipio dictamina normativas específicas para regular este nuevo modelo de transporte. Por ejemplo, en el caso de Palma, los conductores han de tener un mínimo de 15 años y tienen prohibido circular por las aceras.
8 comentarios
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victorEn su día compré una para poder meterla en el tren (vivia en un pueblo) y la devolví al día siguiente. El manillar no se quedaba fijo, el sillin se bajaba y giraba, no frenaba casi( con los pies tuve que frenar una vez), era totalmente inestable... Vamos, una y no más santo tomas.
No hay nada como una buena bici!! Pero somos muy cómodos y tenemos que ir en coche o patinete eléctrico mientras recorremos 1 km para ir a trabajar, y mandando WhatsApps al mismo tiempo!!
elantonioPara eso nada como una mole de aprox 1.500 kilos y que se mueva a 40 km/h...., también lo puedes llamar coche.
luis martin¿Ni siquiera una plegable?, si la consideras, vigila bien que sea una de buena calidad, las plegables "barateras" pecan todas de las bisagras de plegado, a veces merece la pena gastarse el dinero en una bici buena que te dure años, en el caso de las plegables con más razón ya que la mayoria "mueren" por las bisagras que te comento....
Yo trabajo en el centro de Palma y voy cada día en autobús porque no tengo espacio en casa para un bicicleta, el bicipalma no llega ni de lejos a mi barrio y es imposible aparcar en el centro todo el día. Estoy a la espera de que Cort lleve a cabo la tan anunciada ampliación del bicipalma para inscribirme y usar la bici a diario, da igual si eléctrica o mecánica.
Para asustar herir a peatones las dos son buenas.
Articulo flojo, parece que el periodista no circula mucho con esos medios de transporte, de hecho yo he probado los dos y claramente gana la bici, más capacidad de carga (cesta y/o alforjas), rueda de mayor diametro (muchisisma mas estabilidad y seguridad ante los baches), y por supuesto mucho mas ecologica que el patinete, por otra parte el patinete tiene una corta vida ( a los 2/3 años la mayoria cascan, no por la bateria sino por las bisagras y rodamientos), a mi juicio la mejor combinación es bici electrica, sobre todo para los que se inician.