Existen multitud de supersticiones de cara al sorteo más esperado del año.

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Para todo aquello que es cuestión de suerte existen rituales y supersticiones. La Lotería de Navidad no se queda atrás, es uno de los días señalados para aquellos que confían en acariciar la suerte y llevarse alguno de los premios. Año tras año, millones de españoles sueñan con llevarse 'el Gordo', el premio de los premios. Aunque todo depende del azar, son muchos los que siguen rituales y compran números concretos que son objeto de premoniciones.

El ritual más popular es buscar el décimo con alguna fecha señalada, en ocasiones vinculada a algo personal y en otras a la actualidad del año. Este 2022, uno de los números del sorteo extraordinario que más rápido se ha agotado ha sido el 28.222. La cifra corresponde a la fecha en la que Vladimir Putin comenzó su ofensiva contra Ucrania. Otro número de Navidad es el 20.182, no pertenece a ninguna fecha, sino que es una predicción de uno de los videntes que están más de moda en redes sociales, Luis 'el Oráculo'.

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Otro de los ritos más conocidos es frotar el décimo por la barriga de una embarazada, por la cabeza de un calvo o por la chepa de un jorobado. Según explican, esta creencia se debe a que todas estas cosas tienen forma de 'bombo'. Algunos defienden que si se pasa el décimo comprado por el lomo de un gato negro las posibilidades de tener suerte con ese décimo se multiplican. Entre las supersticiones más extendidas también está la de llevar un alfiler enganchado en el jersey o la chaqueta durante el sorteo de la Lotería de Navidad el 22 de diciembre. También que, con el objetivo de atraer a la diosa Fortuna, hay que colocar una moneda de oro junto al décimo.

Entre las más excéntricas está la de hacer montoncitos de monedas en las esquinas de la casa para atraer al dinero y evitar hacer cosas que atraigan a la mala suerte, como puede ser pasar por debajo de una escalera o cruzarse con un gato negro. Junto con estas acciones, también existen señales que se pueden interpretar como símbolo de buena suerte, como que se te caiga un vaso o un plato de las manos el día anterior al sorteo. También existe una creencia que defiende que soñar con un toro es señal de que te tocará la lotería. A pesar de los rituales, el sorteo de la Lotería de Navidad se basa en el azar y la suerte, ya que todos los números están en el interior del bombo.