Cata de vinos en las bodegas JL Ferrer

Tras abrir los vinos, mientras se aireaban, se ha realizado una pequeña visita guiada por las instalaciones. No era para menos, la ocasión lo merecía: han catado vinos negros, blancos, espumosos y dulces de distintas añadas, algunos de hasta más de 20 años de antigüedad. «Queremos que saboreen la tradición vinícola de Binissalem y comprueben que nuestros vinos -elaborados todos con variedades autóctonas- envejecen muy bien», ha destacado Juan Luis Roses, presidente de la D.O. Binissalem y gerente de las bodegas JL Ferrer.

Sin embargo, la mirada de las bodegas no está centrada en el pasado, sino en el futuro, con los viñedos a punto de florecer, esperan una buena temporada de cara al vermar de septiembre. El tiempo -el meteorológico y el temporal- lo dirá. De momento cabe disfrutar de los buenos vinos que las tierras mallorquinas dieron años atrás y cuyo sabor aún perdura.