Algunos vecinos de la plaza de las Columnas piden que se retire uno de los dos bancos de piedra que hay y que está ubicado donde estuvo la gasolinera. | Click

TW
0

Para empezar, contaros que hoy, jueves, a partir de las 19 horas, en La Tertulia –calle Ausias March, de Palma–, la Asociación Círculo de Escritores de Baleares celebrará su reunión mensual. El escritor Carlos Ordinas, presidente la misma, nos anunció días atrás que estaba haciendo gestiones para invitar a una persona –no nos dijo de quién se trata– para que diera una charla a los asistentes. Y es que lo que pretende dicha Asociación, además de reunir a todos sus miembros una vez al mes, es invitar a un escritor para que cuente sus experiencias. También esta tarde puede que Ordinas Noguera informe a los asistentes de cómo van las gestiones acerca de que Cort ceda un espacio para las reuniones de la Asociación que preside. Pues todo eso, a partir de la siete de la tarde de hoy.

Cena solidaria

Y de literatura pasamos a solidaridad, en esta ocasión solidaridad con Aspanob. Y es que, según nos cuenta Jaume Coll, fundador de esta asociación, el próximo 24 de septiembre, y bajo el lema ‘Ayúdanos a poder seguir tirando del tren’, en Lío Mallorca –Plaza Gomila, 3, Palma–, se celebrará una cena benéfica que dará comienzo a las 20 horas, a la que seguirá un show y una rifa solidaria con interesantes premios. Como las plazas son limitadas, hay que reservar en el 971733473 y 629201224. Que todo sea por Aspanob y la labor social que está llevando a cabo. Queremos decir que cuantos más nos apuntemos, mayores serán los beneficios para esta asociación.

Banco, bicis y patinetes

La otra tarde, invitado por un ‘ciudadano a pie de calle’ de la zona, nos estuvimos dando una vuelta por la plaza de las Columnas. El hombre nos puso en contacto con algunos vecinos de la misma, quienes se quejaron de que a la altura del número 15, donde antes de la reforma había una pequeña gasolinera, han colocado bancos de piedra en hilera de a dos, en la que, sobre todo en fines de semana, se sientan algunos, montan una tertulia, beben, a veces ponen música y lo dejan todo perdido. Por ello piden que sea retirada una de las hileras de bancos, y que se vea más a menudo a efectivos de la Policía Local. De hecho, sin ser fin de semana, ni haber anochecido, vemos en uno de los bancos, ubicado junto a uno de los juegos infantiles dibujados en el suelo, a tres o cuatro de charla, sin meterse con nadie, pero con litrona en mano, más dos o tres cascos de cristal y dos latas de cerveza vacías, tirados debajo del banco, donde seguramente se quedarán, puede que acompañados de las litronas, cuando se marchen. Se queja también otro de los vecinos de que las ramas de los árboles de la remozada calle Nuredduna, que han sido podados por la mañana, se han quedado tirados en el suelo. «¿Qué les hubiera costado llevárselos hoy?», dice. Por último, lamentan el trasiego de bicis y patinetes que hay, tanto en la zona peatonal de la citada plaza, como en Nuredduna, que también es peatonal, y que como tal es para peatones, y no para bicis y patinetes, algunos rodando a bastante velocidad.

Y ahí siguen...

En febrero de 2023, el que era alcalde de Palma, José Hila, anunció la retirada de las antiguas cabinas telefónicas, que tan buen servicio dieron a la ciudadanía del país durante décadas, pero que la telefonía móvil las dejó fuera de servicio, y más cuando todos los ciudadanos dispusimos de un móvil.

Pues bien, Hila fue testigo de la retirada de la que estaba en la esquina de s’Escorxador, de Palma. Durante el acto anunció que entre Telefónica e Infraestructuras de Cort, se procedería a retirar las más de cien cabinas que quedaban en Palma. Pues bien, no sabemos cuántas han sido las cabinas que han seguido la suerte de aquella, pero no deben de haber sido muchas, pues Palma está plagada de ellas, y… Pues que si se han de retirar, como dijo Hila tres meses antes de las elecciones, que se retiren ¿no?, aunque sea cuatro meses después del tiempo señalado.

pptele.jpg
Imagen de una cabina telefónica en Palma.

Lo decimos, no por enumerar promesas incumplidas –pensamos que si Hila no las retiró todas fue porque no tuvo tiempo–, sino por las cabinas en sí, que siguen ahí, convertidas en chatarra utilizada como soporte publicitario. Así que, ¡retírenlas por favor! Algo tan histórico y beneficioso para la sociedad como han sido no merece un final como este.

Cables

Igual es una pregunta tonta, pero como nos sorprende mucho, no que el grueso cable eléctrico cruce la calle por los aires, de un poste a otro, sino que lo haga atravesando las copas frondosas de dos árboles, es por lo que preguntamos a quién corresponda si eso es normal. El asunto en cuestión está en la calle General Ricardo Ortega, en el tramo no reformado, poco antes de llegar a la galería de arte recién inaugurada.

¿Es lógico que eso esté así, que el cable atraviese dos copas de otros tantos árboles, uno de ellos con una rama a punto de caerse, rama que está cerca de dónde pasa el cable? Es más, el cable que viene de cruzar la calle por los aires ha de estar sujeto al poste por dos puntos, a través de dos cables. Pero resulta que en este caso está sujeto solo por uno, lo cual nos hace pensar que está mal sujeto, porque son dos los puntos a enganchar, no uno. ¡Dos!, y ahí solo está enganchado de uno. Por eso, no estaría de más echarle un vistazo. ¡Que nunca se sabe lo que puede pasar! Y echar un vistazo en general, pues imaginamos que ese árbol no será el único que tiene ese problema.