Luego -en lo que ellas seguían bailando, o mejor montando la coreografía adecuada a la música que sonaba-, echando mano de la Wikipedia, ampliamos más el concepto de K-pop, que en realidad significa Pop coreano, y que incluye, además del pop, el rap. Rock, EDM, etcétera. Movimiento que comenzó en dicho país a principios de 1990, y que inmediatamente se extendió por gran parte de Asia, pasando a continuación al resto del mundo. Y por lo que nos cuentan las chicas, del K-pop, la coreografía es importante, cosa que ellas están ensayando en esos instantes.
Ellas son ocho, «aunque, a veces, los grupos son más grandes», explica Neus, que aclara que «en realidad, nosotras somos dos grupos, Wisteria y Ethercal», lo cual nos hace pensar que el buen rollo es el denominador común, pues, al menos entre ellas, lo hay. De hecho, están ensayando juntas de acuerdo a las ideas de ambas.
¿Qué por qué ensayan ahí, frente a los cristales?, «pues, primero, porque a través de los cristales nos vemos bailando, lo cual nos permite ver si lo hacemos bien, si cometemos algún error, en qué hemos de mejorar… Y segundo, porque tenemos espacio más que suficiente para hacer las coreografías…», que se inspiran en vídeos sobre K-pop que encuentran, generalmente, en Youtube. «Nosotras lo hacemos por nuestra cuenta, basándonos en esos vídeos, a los que hacemos pequeños cambios. ¿Qué si en Mallorca hay alguna academia donde se baile K-pop? Sí, que sepamos, una en Palma y otra en Inca. Que seguro hay alguna más».
¿Qué pasa si cuando llegan encuentran ese espacio ocupado por otro grupo?, preguntamos. «Pues nos vamos a los cristales de la otra parte. Y si están ocupados ambos, esperamos, o lo compartimos con uno de los grupos que está ensayando, pues, como he dicho, entre nosotras hay muy buen rollo». Y en cuanto a la vestimenta, en el caso de competir, o de presentarse ante un auditorio, «esta depende del concepto de la canción en la que nos inspiramos para hacer la coreografía. Es decir, podemos vestir de pantalones, faldas, vestidos…».
Mientras ensayan los movimientos, ya sean tumbadas sobre el piso, ya sea de pie, ya sea elevando a una por encima de sus cabezas, observamos que la gente que va y viene a veces se para y las observa, «incluso, a veces también, algunos hacen un amago de sumarse al grupo». Pues si pasan por ahí, y las ven, ya saben lo que hacen: ensayar coreografías de K-pop, de momento, para mejorar… Porque tampoco descartan, si surge la ocasión, de presentarse a Got Talent, o cualquier otro concurso de baile de la televisión. Mientras, las únicos escenarios que tienen para demostrar lo que son capaces de hacer en pop coreano del sur son los de los actos sociales, o eventos que se celebran en Palma o en cualquier localidad de la isla.
3 comentarios
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El kpop fomenta valors capitalistes baraters
Bien hecho, hay que canalizar la energía hacia una actividad.
Cualquier cosa será mejor que el reggaeton