El chef mallorquín cuenta en Aromata con un gran huerto urbano.

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Además de una excelente trayectoria profesional y numerosos galardones, premios y reconocimientos, Andreu Genestra (Inca 1983) es un empresario y cocinero en constante evolución. Tras celebrar el décimo aniversario del restaurante Aromata, una de sus apuestas más personales, el establecimiento cambia de ubicación para ofrecer mejoras a su fiel clientela. En pocas semanas, Aromata abrirá sus puertas en el hotel HM Palma Blanc, para dar continuidad a su historia.

«Cuento con todo el equipo profesional y nos llevamos desde las copas hasta las lámparas», desvela Andreu Genestra quien refleja la ilusión de quien abre su primer negocio. Hombre minucioso y estricto, asegura que «mi manía, a la hora de entrar en una cocina, es que esté limpia, sea la más moderna o la más vieja. A un restaurante lo evalúo por sus croquetas, por su tartar, si las patatas fritas son las tradicionales y no congeladas, por su frit mallorquí o por el arroz. Ahí es donde se ven los fallos que pueda tener la mano del cocinero».

La cocina de Aromata, seguirá ofreciendo su tradicional propuesta gastronómica de mediodía, a la que se unirán las sugerencias de temporada. «Este cambio ha sido una cosa buscada. Cuando todo el mundo cierra tras el verano, nosotros seguimos abiertos para la gente de aquí y que puedan disfrutar de una cocina con productos de temporada como el jonquillo o el picornell, entre otros platos nuestros». El restaurante contará con párking subterráneo para sus clientes, además de un huerto urbano donde se cultivará gran parte de los productos con los que se cocine. «Me gusta trabajar el huerto, algo que compartiré con mi padre. Todos nuestros proveedores son locales algo que da continuidad a lo que fue la construcción de este hotel».

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El HM Palma Blanc es un referente en Ciutat por su arquitectura innovadora, su sello mediterráneo y su apuesta por la sostenibilidad. Los comensales, además de elegir entre un menú o una selección de platos, disponen de una envidiable bodega con más de 300 referencias de vino, además de champan Ruinart.

Adelantándose a los tiempos actuales, Genestra mira con optimismo al futuro. «Va a venir una nueva evolución de cocina mallorquina, y no tiene porque ser la tradicional, sino más evolucionada. Es tiempo de volver a escuchar y no imponer. Voy hacer un híbrido entre lo local residente y lo local mallorquín».

La evolución de la cocina mallorquina

La unió entre HM Hotels y Andreu Genestra, pretende dar un salto cualitativo a la gastronomía del HM Palma Blanc, ya que el chef mallorquín también se hará cargo del F&B del establecimiento, modernizando su desayuno y sus cartas de snacks.

En lo personal, Genestra confiesa que «a diario utilizo tres chaquetillas. Es muy importante la presencia de cara al cliente y trabajar en la cocina no es excusa para que la lleves manchada». Por otro lado, descubrimos que «en casa desayuno y ceno, pero al mediodía pico de una empanada o coca de trempó. Entre mis platos preferidos está el arroz seco o un bon frit mallorquí». A la hora de trabajar entre fogones, «no hay gritos en la cocina. Máxima concentración en el equipo por respecto al cliente».