La historia de Jaime y Teresa, dos compañeros de instituto, ha sido muy aplaudida en las redes. | Alex Rosa

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Una vez más las redes sociales han hecho su magia. Jaime y Teresa eran amigos en el instituto, a poco de acabar el curso Teresa, siempre de «notazas» estaba nerviosa por un examen de matemáticas. Entonces, él le pasó una nota en 1998: «Te apuesto un helado a que apruebas, como siempre». Ella respondió: «Yo, Teresa, en pleno uso de mis facultades mentales apuesto un helado a que suspendo matemáticas». Y escribió la fecha.

Acomodando papeles días atrás, Jaime encontró la nota y se dio cuenta de que se cumplían 25 años de aquel contrato; en medio, la selectividad, la universidad, el trabajo y la misma vida hicieron que se perdieran la pista.

No dudó en buscar a Teresa e internet. Y la encontró. Es médico y trabaja en el hospital de Valdecilla. Jaime no dudó en presentarse allí para finalmente tomarse ese helado que se debían. Para demostrar que se había sellado la promesa ha compartido otra imagen en las redes. Se han hecho una foto de sus zapatos. Él llevaba unas converse y ella unas cuñas de esparto.

Una historia con final feliz que demuestra el verdadero sentido de la amistad y que ha sido muy aplaudida entre los usuarios de las redes sociales, especialmente en X (antes Twitter). Y es que como bien dice el joven en su tuit: «La vida solo cobra sentido cuando nos apartamos de los raíles por los que nos lleva; cuando dejamos espacio al azar».