Durante unos 20 minutos, los vecinos han bloqueado el acceso de los turistas hasta las playas cruzando continuamente uno de los pasos de peatones de la zona, lo que ha obligado a detener a gran multitud de coches en una de las horas puntas donde más visitantes se concentran. De esta manera, han mostrado su hartazgo ante una situación que consideran insostenible.
«Estamos cansados de que los coches aparquen donde quieran, con total impunidad. No hay multas para ellos ni restricciones. Hemos llegado al límite», ha explicado la portavoz de un grupo de vecinos a La Voz de Galicia. Sin embargo, los residentes han aclarado que no están en contra de la llegada de turistas a la zona, pero exigen medidas para controlar esta situación en verano.
Esta iniciativa parte de la saturación que afecta a esta pequeña comarca costera y el caos de aparcamiento que se genera en los meses estivales. Los vecinos han señalado que la situación se vuelve insostenible por el comportamiento incívico que tienen los turistas al aparcar, ya que bloquean el acceso a calles, negocios y a varias viviendas de la zona.
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