Parece que hoy precisamente se celebran en Estados Unidos las temibles elecciones de media legislatura a la Cámara de representantes, pieza clave del complejo sistema de contrapesos al poder que en este caso amenaza con dejar en nada al presidente Biden, y resucitar a Trump. Un contrapeso muy pesado, que puede poner patas arriba la balanza, y en vez de equilibrar, aplastar al hombre más poderoso del mundo y convertirlo anticipadamente en pato cojo. Un laberinto, los contrapesos de la media legislatura. De toda la vida los poderes se atraen poderosamente entre sí como electroimanes, tienden a asociarse y establecer conexiones por medio de pasadizos secretos, galerías subterráneas, fortificaciones de defensa dotadas de alcantarillado, pozos ciegos, puestos de vigilancia, puertas falsas, vastas redes logísticas de suministros, fosos con trampas, y si se hace necesario, hasta emiten una especie de rizomas que asienten y comuniquen toda la estructura. No es nada fácil la separación de poderes que estipulan los sistemas democráticos; no bien los separas ya se han vuelto a juntar, tal como vemos aquí, por ejemplo, con el poder judicial. El ejecutivo, el legislativo y el judicial, así como el económico, el religioso, el militar, el intelectual y el mediático, entre otros que no vale la pena mencionar, enseguida tienden a entrelazarse como patos mandarines, fusionarse creando nudos inextricables, y en definitiva, a montar una superestructura en forma de grumo sobre la que rebota todo. Por la fuerte atracción del poder por poder, decíamos. Así que para controlar y dificultar este proceso, los sistemas democráticos urdieron un prolijo dispositivo de balanzas, pesos y contrapesos, poleas, palancas y puentes levadizos, así como pasos fronterizos y líneas rojas. Que a veces hasta funcionan, y a veces no, ya porque el contrapeso (judicial, por ejemplo) se alía con el peso, ya porque no contrapesa nada, ya porque es demasiado pesado y lo paraliza por aplastamiento. Que es lo que suele pasar con las elecciones norteamericanas de media legislatura, un contrapeso colosal. Tan democrático que hoy puede liquidar a Biden y resucitar a Trump. Quizá habría que habilitar otro tipo de dispositivos para evitar que los farsantes se beneficiaran de los contrapesos democráticos.
Contrapesos muy pesados
09/11/22 3:59
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3 comentarios
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SisetUn saludo Siset.
AngelcaídoCrec que me'n vaig a Lluch a posar una espelmeta. Estic d'acord amb tu
No me gusta TRUMP, no me gusta BIDEN . Pero los qué nos han puesto varias veces a las puertas de un holocausto NUCLEAR han sido los demócratas .