TW
4

Expectación ante el regreso de Francisco Gil White a Palma con su anunciada conferencia en Ca n’Oleo. El título no puede ser más sugerente para las personas interesadas en el devenir de la situación internacional: ‘¿Y si Israel ganase? Consecuencias para Occidente’. Ocurre, sin embargo, que entre el tiempo transcurrido desde que se anunció el evento y el día de su celebración, el próximo miércoles 18 de diciembre, los acontecimientos se precipitaron: Israel ya ha ganado. Lo demuestra lo ocurrido en Siria con la caída del tirano Assad y su régimen de terror.

De manera que podríamos denominar indirecta, Israel ha provocado el derrumbe del siniestro régimen sirio. Que nadie lo dude: el 7-O fue el comienzo del fin para la dictadura siria. De no mediar los bombardeos israelíes sobre Gaza –Hamás– y más tarde sobre el Líbano –Hezbolá– no se habría roto el denominado ‘Eje de la Resistencia’ creado por el gran responsable de la guerra en Oriente Medio, que no es otro que Irán.

No lo digo yo, pobre cronista regional –«joyero rural» me denominaba el extinto Manresa– sino el doctor Raz Zimut, investigador senior del Instituto de Estudios para la Seguridad Nacional de Israel. La caída de Assad representa para Irán ni más ni menos que la pérdida de la primera línea de combate contra Israel. Muchos ignoran que la intervención de Irán en la guerra de Siria, que ha durado 11 años, fue de una magnitud decisiva, descomunal. El régimen teocrático de los ayatolás aportó decenas de miles de combatientes y miles de millones de dólares en armamento. Su objetivo, mantener la supremacía chiíta en la región y acosar al estado hebreo, el «gran enemigo sionista» que ellos sueñan con borrar del mapa. Pero Irán, tras la guerra iniciada por Israel en Gaza tras el 7 de octubre de 2023, ya no es lo que era. He aquí el trasfondo que no quieren ver ni los gobernantes occidentales, nutridos por el veneno antisemita de genoma netamente europeo, ni los tontos útiles que han decretado la «alerta antisionista» por el mero hecho de que un gran especialista internacional acuda a Palma a impartir una de sus grandes lecciones de geoestrategia.

Israel está ganando la guerra –veremos qué dice al respecto Gil White– porque desde el primer momento tuvo una visión general de la situación y también porque el estado hebreo, al contrario de los del resto del mundo, se juega el ser o no ser en cada una de sus confrontaciones bélicas.