Desde que fuera asolada por un tifón, hemos descubierto que existe Mayotte, territorio francés que sobrevive como puede. Lejos de la metrópoli, frente a las costas africanas, el pequeño archipiélago en el océano Índico recibe miles de migrantes irregulares que, a sabiendas de que esas islas son también europeas, buscan participar de sus ‘privilegios’. Por eso, la mitad de su población es ilegal y ni siquiera figura en el censo. Ellos, y muchos de los autóctonos, malviven en arrabales chabolistas cercanos a verdaderos paraísos naturales que podrían convertirse en un poderoso activo turístico. Nuestro Archipiélago nada tiene que ver con aquel otro. Y sin embargo, hay cuestiones paralelas. La ‘riqueza’ y los ‘privilegios’ de los que gozamos gracias al turismo y a nuestra pertenencia a Europa se convierten en foco de atracción para miles de personas que aspiran a participar en ello. Llegan sin nada, algunos trabajan en lo que pueden, descubren que esa ‘riqueza’ es en realidad una muralla inexpugnable y que jamás podrán franquearla. Así que llenan las islas de chabolas, malviven, sobreviven.
Como Mayotte
Palma30/12/24 4:00
También en Opinión
- Estas son las principales novedades en el transporte público para 2025
- La Generalitat valenciana dice que «el Gobierno llega tarde» con sus grupos de trabajo para reconstrucción tras la DANA
- El sinhogarismo llega a la Part Forana: Primeros asentamientos en Inca
- Un hombre se enfrenta a 30 años de cárcel por violar de forma continuada a su hija de 12 años en Andratx
- Ni Palma ni Calvià: este es el municipio de Mallorca con más extranjeros que nativos
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.