Imagen de la acera con las heces de perro. | Estela

Pocos merecen tener mascotas, en Palma hay heces en casi todas las calles, los dueños se desentienden de cualquier responsabilidad. Los sacan a pasear de madrugada para evitar ser sancionados. Ante este problema hay pocas quejas, como si fuese una tontería que las calles esten sucias y por consiguiente, que la sociedad sea incivilizada.