Canela Magalhaes, una joven brasileña de 25 años, ha presentado una
demanda por lo civil ante un juez de Palma en la que denuncia que
fue grabada desnuda en vídeo, sin su consentimiento, cuando
trabajaba en un pase para un catálogo de fotos.
En la demanda se responsabiliza de los hechos a un fotógrafo que
tiene un estudio en Palma y la joven, que dice trabajar como modelo
fotográfica, cuenta que los hechos ocurrieron a finales de 1997.
Para realizar el trabajo ella y la otra modelo se desplazaron al
estudio de un fotógrafo. «Nos teníamos que cambiar los vestidos en
un apartado de la sala -cuenta Canela- y después pasábamos al lugar
donde nos tomaban las fotos con los modelos de la casa que nos
había contratado». La joven relata que cuando ya habían pasado
entre dos y tres horas de trabajo advirtió que había una pequeña
luz roja que se filtraba por detrás de unas sillas. «Mi compañera y
yo intuimos que algo raro ocurría hasta que decidimos acercarnos, y
entonces mi compañera descubrió que había una cámara de vídeo
oculta y que había estado grabándonos todo el tiempo». Canela
cuenta que cuando se cambiaba de vestidos «me quedaba completamente
desnuda y en ocasiones me sentaba, con las piernas abiertas, y la
silla estaba justo delante del enfoque de la cámara de vídeo, igual
que la otra silla que se había colocado para que se sentara mi
compañera».
La joven declara que trabaja como modelo fotográfica y que en
ocasiones ha posado para fotos sexis, pero que nunca lo ha hecho
desnuda ni en top less.
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