TW
0

La Policía Judicial de la Guardia Civil ha detenido a tres individuos acusados de un delito de receptación. Los implicados, supuestamente, compraban material robado a una banda de rumanos desarticulada recientemente.

Según informó ayer un portavoz de la Oficina Periférica de Comunicación (OPC), los presuntos receptadores responden a las siguiente identidades: Tomás V.M., de 63 años de edad, Magín A.O., de la misma edad, y Guillermo M., de 51. Al primero se le registró también su licorería de Cala Major. El mismo portavoz de la 313 Comandancia añadió que los tres acusados adquirían tabaco y bebidas alcohólicas de origen ilícito, ya que al parecer habían sido robadas por las citadas organizaciones rumanas. En la operación, la Benemérita se ha incautado de material por valor de 325.000 pesetas.

Desde el inicio de la época estival la Guardia Civil ha declarado la guerra a las bandas mafiosas rumanas que operan en la Isla y que en la actualidad han ocupado el lugar en el escalafón delictivo que en su día tuvieron otros grupos, como los argelinos. Este tipo de redes, perfectamente estructuradas, se dedica a los robos por el sistema del descuido y a los hurtos. Parte del material lo remiten a su país, en donde están afincados sus jefes, y el resto lo venden a bajo precio. El perjuicio para los pequeños y medianos comerciantes es grande y por eso la Benemérita considera una prioridad acabar con esta modalidad delictiva.