La Audiencia de Palma ha otorgado, por primera vez, la paternidad a
un hombre que ha luchado durante varios años para que se le
reconociera su condición de padre de un niño, pese a la oposición
de la madre. El menor, que tiene cuatro años de edad, será inscrito
en el registro civil con un nuevo nombre, según ha ordenado el
tribunal de la Sección Tercera de la Audiencia de Palma. El niño
llevará el primer apellido de su padre y el segundo de su madre,
que consideraba que su ex novio no será nunca un buen padre para su
hijo.
La sentencia explica que el demandante y la madre del menor
convivieron juntos durante los meses de julio y agosto de 1994 en
el piso de la hermana de la mujer. Posteriormente, compartieron
otro piso durante un mes en la calle Gabriel Poncela de Palma.
Durante este tiempo abrieron una cuenta de ahorro conjunta. Meses
después de romper la relación la mujer y su ex novio, antes de que
el pequeño naciera, mantuvieron una extensa correspondencia. En
ella se reconoce que el hombre es el padre del niño que estaba a
punto de nacer. Otro hecho que demuestra esta paternidad, según
refleja la sentencia, es que la mujer acudió a un psicólogo y al
servicio de Menores del Govern y reconoció que el demandante era el
padre de su hijo. También señala la sentencia que el juez le
ofreció a la mujer la posibilidad de someterse a una prueba
biológica. Ella se negó, pese a que podría haber sido una prueba
que también le hubiera servido a ella para demostrar que el niño no
era hijo del hombre que reclamaba su paternidad. El tribunal
reconoce que esta negativa no supone una confesión, pero si un
indicio al no querer colaborar con la administración de
justicia.
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