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Javier Morell, un joven de 20 años de edad, fue apuñalado en la noche del domingo al lunes frente a una conocida discoteca del Passeig Marítim de Palma, a la altura de la dársena de Can Barbarà. El muchacho fue intervenido en la residencia sanitaria de Son Dureta y ayer por la tarde recibió el alta médica. La Policía Local investiga la agresión.

Según explicaron testigos presenciales, sobre las once de la noche dos jóvenes se ensarzaron en una violenta discusión por motivos que no han trascendido y a la refriega se sumaron, en poco tiempo, una veintena de zagales. En un momento dado, uno de los contendientes esgrimió un arma blanca y apuñaló en la espalda a Javier Morell, que comenzó a perder gran cantidad de sangre. La víctima quedó aturdida e indefensa y recibió una lluvia de golpes y patadas del agresor, que además le acuchilló por segunda vez en la misma zona.

Las fuentes consultadas añadieron que el herido, a duras penas, consiguió llegar a la dársena y desde allí se arrojó al agua para evitar que el atacante continuara asestándole puñaladas. El alboroto de la refriega llamó la atención de transeúntes y vecinos que, curiosos, se acercaron a aquel tramo para interesarse por lo ocurrido. El centro de emergencias del 112 recibió algunas llamadas telefónicas alertando del apuñalamiento y una ambulancia del 061 se desplazó hasta Can Barbarà para atender al herido. Javier Morell se encontraba casi inconsciente y los médicos, durante media hora, procedieron a atajar la hemorragia y estabilizar sus constantes.

La dotación sanitaria lo trasladó hasta Son Dureta, en donde los médicos lo intervinieron con éxito y comprobaron que las lesiones no le habían afectado órganos vitales. Ayer tarde el joven recibió el alta. Con respecto al agresor, la policía ya ha identificado a varios jóvenes, pero parece ser que el autor de las puñaladas todavía no ha sido detenido.