«El incendio tenía dos focos y ha sido claramente intencionado». La
consellera de Medi Ambient, Margalida Rosselló, confirmó ayer que
el fuego del parque natural de s'Albufera no había tenido un origen
casual, pero añadió que las consecuencias ecológicas son mínimas.
Rosselló compareció ayer por la tarde ante los medios de
comunicación y aseguró que el fuego, en sus primeros momentos,
tenía dos focos. Uno de los frentes se extendió con gran celeridad
«debido principalmente al fuerte viento que soplaba, que horas
después amainó», agregó la responsable del Govern. La consellera
opinó que el fuego quedaría controlado «en las próximas horas» y
adelantó que había calcinado unas 50 hectáreas de cañizo.
«En estas fechas está demostrado que el riesgo es mayor y este
año hemos apostado un camión cisterna en el parque natural con dos
bomberos que están de guardia», manifestó.
Rosselló explicó que el cañizo devastado rebrota en poco tiempo
y se congratuló de que en la zona afectada no había aves o especies
protegidas «por lo que las consecuencias ecológicas son mínimas».
«Ahora lo importante es saber qué ha pasado y hemos de estudiar a
quién le interesa que se queme una parte del parque natural»,
aseveró la consellera, que agregó que la cobertura aérea "de un
avión y dos helicópteros" había sido muy importante en los primeros
momentos del incendio para evitar que las llamas se propagaran
todavía más.
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