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Sebastián B., uno de las dos personas que ingresó en prisión por su supuesta relación con la muerte del empresario Pedro Estarellas, mantiene que el otro detenido le implica por venganza. El joven afirma que José María C.M. ha querido relacionarlo con esta muerte porque le pidió dinero y no quiso prestárselo.

La juez del juzgado de instrucción número 4 de Palma levantó ayer el secreto de sumario que mantuvo durante la investigación policial. La magistrada recibió ayer el informe que ha redactado el Grupo de Homicidios, en el que se establece el grado de participación de cada uno de los implicados en este asesinato. José María, el otro detenido que ha ingresado en prisión, implicó a Sebastián y dijo que había sido él quien cometió el crimen. El joven dice que él aguardó en la calle mientras Sebastián golpeaba a la víctima. Después le llamó a su teléfono móvil y le dijo que subiera.

Sin embargo, el otro implicado afirma que ello no es cierto y que puede demostrar que no realizó ninguna llamada. Su abogado Luis Moreno tiene previsto presentar en el juzgado una serie de testigos que, según su cliente, demostrarán que el día de los hechos Sebastián no pudo estar en el lugar de los hechos. Sin embargo, el detenido ha reconocido que días después mantuvo algunas reuniones con los otros detenidos. Uno de ellos, Juan Pedro P.P, también ha exculpado a Sebastián y afirma que José María le dijo que había matado a un hombre.