El Cos de Bombers de Palma sofocó en la medianoche del sábado al
domingo un incendio que se declaró en una planta baja de la
barriada de sa Vileta y que le podría haber supuesto un mal trago a
su morador, que dormía en esos momento y que afortunadamente pudo
salir ileso.
De acuerdo con las fuentes municipales consultadas por este
periódico, la alarma por el siniestro en la calle Zaragoza número
35 saltó minutos antes de la medianoche. La policía y los bomberos
recibieron varias llamadas telefónicas alertando de que aquella
planta baja estaba envuelta en llamas y de inmediato se puso en
marcha un dispotivo de emergencia. Las llamas se habían iniciado
por causas que están siendo investigadas en el sofá de la sala y se
propagó a otros muebles y al trastero.
Cuando los bomberos llegaron la única persona que pernoctaba en
la vivienda había conseguido salir por sus propios medios y el
dispositivo se centró en sofocar con prontitud el fuego. Desde
varios puntos distintos los funcionarios del parque de sa Teulera
arrojaron agua de forma ininterrumpida durante un cuarto de hora y
finalmente se comprobó que el incendio había sido controlado. Sin
embargo, las labores se prolongaron tres cuartos de hora más, ya
que la planta baja estaba inundada de un denso humo y era necesario
airearla, así como realizar el correspondiente informe.
Los bomberos hablaron con el morador, que les explicó que cuando
se inició el fuego él ya llevaba un tiempo durmiendo y añadió que
desconocía su origen. Los daños materiales fueron de consideración,
pero las fuentes consultadas aseguraron que en este tipo de
siniestros -en los que los moradores están durmiendo- existe un
riesgo muy elevado de que el humo los intoxique antes de que puedan
reaccionar.
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