La protesta de la Policía Local de Palma para cobrar las horas
extras atrasadas continúa y ayer cientos de agentes se tiñeron el
pelo en solidaridad con los agentes que ya lo hicieron el
miércoles.
En la cafetería del cuartel de San Fernando 'alguien' instaló un
maniquí que portaba un maletín en el que se podía leer: «El Poli
del Frac». La dinámica fue similar a la del primer día, pero ayer
el número de policías que secundaron la medida de presión fue muy
superior y no sólo se limitó a los funcionarios del cuartel. Otros,
que patrullaban en coches o a pie, y agentes de las comisarías de
cada distrito, se tiñeron el pelo o la barba. La respuesta de los
ciudadanos, un día más, fue positiva, si bien se recogieron también
algunas críticas.
Lo cierto es que el sentimiento de crispación e indignación
contra los mandos policiales de Cort es palpable y ayer muchos
policías opinaron que el tema de las horas extras «sólo ha sido la
gota que ha colmado el vaso». Para estos funcionarios «son muchas
cosas las que no cambian y ya es hora de que tengamos un modelo
policial definido. Cambian los jefes, pero todo sigue igual. Ahora
no podemos realizar funciones de Policía Judicial y, sin embargo,
tampoco tenemos claro qué es lo que podemos hacer», añadieron.
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