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Un ciudadano de Hungría, llamado Makai Atila, de 33 años de edad, ha sido detenido en Palma por la Guardia Civil. Este individuo era buscado desde hacía unos dos años por las autoridades de su país, porque le acusan de haber vendido a una mujer a una organización mafiosa y después haberla obligado a que ejerciera la prostitución.

Este orden de arresto se tramitó a través de Interpol. La Fiscalía de Hungría había ordenado la detención de este individuo, que está considerado como un delincuente muy peligroso debido a sus relaciones con mafias dedicadas al negocio de la prostitución. En la documentación remitida a la Guardia Civil de Palma se explicaba a la Fiscalía le acusa de un delito de trata de blancas y otro de tráfico de seres humanos. Makai Atila llegó el domingo por la mañana al puerto de Palma. LLegaba a bordo de un barco que había zarpado del puerto de Barcelona. El sospechoso fue rápidamente identificado por los agentes, ya que se caracteriza porque lleva los dos brazos tatuados. El individuo mostró una documentación falsificada e intentó hacerse pasar por un ciudadano de Eslovaquia. El individuo húngaro fue puesto a disposición judicial y, al pesar sobre él una orden de extradición, se ordenó su ingreso en prisión.

Los efectivos de la Guardia Civil están intentando averiguar que motivo condujo a este individuo a viajar a Mallorca. Se sabe que tiene importantes contactos con el mundo de la prostitución y no se descarta que su viaje esté relacionada con esta actividad.