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S. CARBONELL-EFE Margalida Rosselló, consellera de Medi Ambient del Govern, afirmó ayer que el temporal que asoló el pasado fin de semana varias zonas de las Illes Balears podría haber arrancado, según las primeras estimaciones, más de 75.000 árboles, en su mayoría zonas de pinar, aunque también bastantes encinas. La consellera insistió ayer en que las cifras que se están barajando son «provisionales» puesto que «todavía se están realizando los trabajos de evaluación de daños», pero el acondicionamiento de la masa forestal afectada supondrá un coste aproximado de 253 millones en Mallorca, 16 en Menorca, 8 en Eivissa y otros 8 en Formentera.

Rosselló quiso dejar claro que, «en función de los desperfectos que se detecten se destinará la partida presupuestaria pertinente para recomponerlos», aseguró que las lluvias caídas han supuesto una mejora importante en el nivel de los acuíferos y recordó que la Conselleria ha puesto a disposición de las emergencias todos su medios, entre otros 13 brigadas del Ibanat, que suponen un contingente humano de más de 80 efectivos, además de contar con guardas forestales y técnicos. Fuentes de la conselleria han manifestado que «el 30 por ciento de la zona de pinar litoral ha sido dañada por el fuerte viento» y también se calcula que «unos 400 pinos del Parc Natural de Mondragó han sufrido desperfectos e incluso han sido muy dañados».

Por otra parte el grupo ecologista GOB advirtió ayer de que la caída de miles de árboles durante el temporal del pasado fin de semana puede agravar la plaga del «Tomicus destruens», un pequeño escarabajo que mata los pinos. Según un comunicado remitido ayer por esta organización, aunque el citado animal es un componente habitual de los pinares de Balears, que generalmente no causa problemas, la situación de sequía de los últimos años ha debilitado mucho la resistencia natural de los pinos y las densidades de población de este escarabajo se has incrementado de forma considerable.

Por su parte, Miquel Angel Borrás, presidente de la Comissió de Medi Ambient del Consell Insular, indicó ayer que el organismo insular está habilitando terrenos donde poder almacenar los pinos caídos a consecuencia del vendaval. «También proporcionaremos trituradoras para poder reutilizar la madera de los árboles», aseguró.