Joan Miquel Mut y José Manuel Sierra presentaron la memoria policial. Foto: S.AMENGUAL.

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La Policía Local de Palma exigirá que los padres de menores infractores paguen las multas de tráfico que les son aplicadas y que hasta hora, en palabras del concejal José Manuel Sierra, caían en «saco roto». Sierra hizo ayer estas declaraciones durante la presentación de la memoria anual de la Policía Local y aprovechó para anunciar la realización de un «Programa para la prevención de accidentes de tráfico en motocicletas y ciclomotores», que intentará reducir las dramáticas estadísticas de este colectivo.

Los adolescentes y los jóvenes suponen el 50% de las víctimas de siniestros automovilísticos en Ciutat y el 78% de los conductores de motos y ciclomotores implicados en accidentes el año pasado tenía menos de 30 años de edad. De los 22 fallecidos que se contabilizaron en las carreteras o calles de Palma durante 2001 el 36% eran conductores o pasajeros de vehículos de dos ruedas y, por todo ello, la Policía Local ha confeccionado un programa de concienciación y prevención entre los más jóvenes e, indirectamente, entre sus padres y tutores.

Otro punto abordado por el cuartel de San Fernando es el que hace referencia a la utilización del casco protector, que en ocasiones no basta con llevar, sino que es necesario que esté correctamente sujeto a la cabeza, que esté homologado y que sea de calidad. El programa advierte que la asistencia sanitaria debe ser rápida y óptima, por lo que la coordinación entre la policía y las ambulancias «debe ser revisada constantemente». En otro orden de cosas, Sierra destacó como uno de los datos más relevantes de la memoria anual que el número de accidentes ha disminuido con respecto al año 2000 en un 4'94%, aunque los datos hablan por sí solos y en 2001 murieron un total de 22 personas y otras 2.162 resultaron heridas de distinta consideración.

Las alcoholemias practicadas durante los doce meses del año anterior fueron 1.063, una cifra inferior a la de 2000, y por meses marzo fue el de mayor siniestralidad, con 386 colisiones, seguido de julio (357), junio (356) y agosto (354). El número total de accidentes en las vías de Palma se situó en 4.020 y por tipología la mayoría fueron embestidas (1.287) y choques (1.155). Otro dato facilitado ayer en el cuartel de San Fernando desveló que el 70% de los viandantes atropellados tienen más de setenta años. Por lo que hace a los controles de radar, durante el año pasado se ubicaron sobre todo en el Passeig Marítim, Aragón, 16 de julio, Can Pastilla, Fra Joan Llabrés, Camí des Reis y Camí vell de Bunyola.