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El Tribunal Supremo ha rebajado la pena impuesta a un padre que abusó sexualmente de su hija de 14 años a una multa de 1.800 euros al considerar que faltan pruebas sobre los otros delitos de agresiones sexuales en grado de tentativa por los que también fue condenado, ya que ésta en el juicio negó los hechos. Así lo acuerda el Alto Tribunal en una sentencia, que anula parcialmente la dictada por la Audiencia Provincial de las Palmas en octubre de 1999 que condenaba a Carmelo R.M. a seis años de prisión.