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Un juez de Palma ha dictado una sentencia en la que se condena a una mujer, vecina de esta ciudad, a que no se acerque a su ex marido, ni a su casa ni a su puesto de trabajo. Esta orden la ha dictado el juez Miquel Florit, titular del Juzgado de Instrucción número 6 de Palma, que declara a la acusada culpable de una falta de amenazas. Le impone una condena de multa de 20 días a razón de seis euros diarios y le anuncia que si no paga este dinero tendrá que cumplir un día de cárcel por cada dos cuotas impagadas. Asimismo, le ordena que en seis meses no se acerque tampoco a la actual compañera sentimental de su ex marido, ni tampoco a las hijas de esta mujer.

Esta pareja se separó el año pasado y el hombre inició después una relación con otra mujer. Sin embargo, no se ha tratado de una separación amistosa, sino que han producido una serie de incidentes que han derivado en la presentación de denuncias por ambas partes. En el juzgado de Palma se tramitan, al menos, unas 10 denuncias, tanto del marido como de la mujer.

Sin embargo, el juez Florit sólo ha juzgado la denuncia que presentó el marido. El juez declara probado que la mujer ha venido llamando por teléfono al ex marido por teléfono y ha insultado y amenazado a él y a su pareja sentimental. La mujer se sentó en el banquillo de los acusados el pasado mes de mayo y la sentencia se ha conocido hace pocos días.

No es habitual que las órdenes de alejamiento que emiten los jueces se dicten contra las mujeres que han tenido problemas con sus parejas. Lo más habitual, según han señalado fuentes jurídicas, es que estas medidas se adopten contra los hombres, ya que suelen ser más habituales los casos de malos tratos y amenazas en los que la víctima es una mujer.

La pareja que ha protagonizado este incidente se encuentra en trámites de separación, pero aún no se ha dictado una sentencia al respecto. Sin embargo, el marido, que fue defendido por la abogada Dolores Puertas, fue denunciado y juzgado por una denuncia por agresión, aunque el juez dictó la absolución.