Un velero sufrió las consecuencias del temporal de viento en es Port d'Andratx. Foto: MICHELS

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El temporal de viento y lluvia provocó a lo largo del día de ayer incidentes en numerosos municipios de las Islas. Los bomberos tuvieron que salir a retirar ramas de árboles de diversas carreteras, aunque sólo quedó cortada al paso de vehículos durante parte de la mañana la que va de Andratx a Estellencs. Los puertos de Menorca y Eivissa se cerraron cuatro horas y se anularon salidas en el de Palma y Alcúdia. La flota pesquera tampoco pudo salir a faenar. Las rachas de viento alcanzaron los 145 kilómetros por hora en el faro de Capdepera, mientras que en el observatorio de Son Torrella, en el Puig Major, se recogieron 76'8 litros por metro cuadrado.

Los servicios de emergencia recibieron numerosas llamadas, la mayoría de ellas entre las tres y las cinco de la madrugada. Todas alertaban de pequeños incidentes como la caída de rótulos de tiendas, señales de tráfico, tejas de viviendas, cristales rotos o que el viento se había llevado contenedores y vallas de obra. En Palma, por ejemplo, los bomberos tuvieron que salir por la mañana a retirar un cartel de grandes dimensiones que se había caído de un negocio de la calle Marqués de la Cenia, y también un árbol de la plaza Teniente Coronel Franco.

A lo largo de la mañana se fue normalizando la situación, aunque los efectivos policiales, bomberos y Protección Civil estuvieron en alerta ante cualquier emergencia que pudiese suceder. Por la noche, la lluvia dejó en Lluc 68'3 litros por metro cuadrado; 37'2 y 34'7 en Selva y Galilea, y 33 en Son Servera. En Palma apenas cayeron ocho litros por metro cuadrado, pero éstos se registraron en pocos minutos. El Centro Meteorológico de Balears recogió en el observatorio de la Mola de Menorca un total de 27'5 litros por metro cuadrado, y la mitad en Sant Joan de Labritja de Eivissa.

En Palma, la intensidad máxima del viento alcanzó los 54 kilómetros por hora en Portopí, y los 77 kilómetros por hora en el Dique del Oeste, según explicaron las mismas fuentes. En el Port de Pollença y Muro las rachas fueron de hasta 99 y 80 kilómetros por hora respectivamente, mientras que en Sant Llorenç des Cardassar llegaron a los 72 kilómetros por hora. En el observatorio del aeropuerto de Menorca se recogieron rachas máximas de 104 kilómetros por hora.