Una camión cargado con 300 kilos de pan se estrelló a primera hora
de la mañana de ayer contra la pared de unos apartamentos de Santa
Ponça, y a pesar de la aparatosidad del siniestro no hubo que
lamentar heridos.
El accidente ocurrió a las 6.00 horas, cuando el vehículo pesado
estaba correctamente aparcado y, al parecer, le falló el freno de
mano. Se deslizó durante 40 metros y luego tiró la pared de los
Apartamentos Rey Sancho. Curiosamente, ningún residente se dio
cuenta de lo ocurrido hasta que una hora después uno de ellos bajó
a la calle y se encontró con el desastre.
Una grúa de gran tonelaje retiró el camión bastantes horas
después de accidente y una patrulla de la Policía Local multó al
conductor, que estaba ausente cuando el siniestro, porque conducía
con una fotocopia del carnet de conducir, que además había
caducado.
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