Los responsables de los dos grandes clanes que controlan la venta
de drogas en Son Banya siguen efectuando compras de gran valor con
las ganancias del narcotráfico. En concreto, miembros del clan al
que la Fiscalía les reclama 275 millones de euros por blanqueo de
capital, han comprado en los últimos tres meses cuatro caballos de
gran valor. Además de fincas rústicas, pisos y otros bienes,
miembros del clan son propietarios de dos cuadras de caballos que
están en Son Pardo, cuadras que también han sido embargadas y en
las que en total hay unos treinta ejemplares.
El sistema que utilizan ahora para eludir las acciones
policiales, judiciales y del fisco, es el de comprar el caballo y
no lo inscriben a su nombre. Así, en los últimos cuatro meses han
comprado tres caballos para la alta competición y una yegua de
cría. Curiosamente ninguno de los animales figura a nombre de los
responsables del clan, pero están en sus cuadras y son entrenados
por una de las personas que aparece acusada en el escrito del
fiscal. Los tres caballos han participado en el último Premi Ciutat
de Palma, y aunque ninguno logró la victoria, los expertos señalan
que se trata de ejemplares de excelente calidad, y es previsible
que en un corto espacio de tiempo comiencen a ganar premios
importantes. Cuando ésto ocurra, puede resultar curioso observar
quién acudirá a hacerse la foto de rigor, para le recogida del
trofeo. Entre los numerosos aficionados que acuden a Son Pardo
estos datos constituyen uno de los temas de conversación. El dueño
de la cuadra, y jefe del clan de Son Banya, acude de manera asidua
a Son Pardo y, curiosamente, frente a la cuadra suele estar
estacionado un turismo deportivo de lujo que conduce un residente
en Son Banya.
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