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MICHELS/G.PICÓ
El Ajuntament de Calvià ha aumentado este verano el dispositivo policial en Punta Ballena, en Magaluf y en Ramon de Moncada (Santa Ponça), y hasta el momento está obteniendo «resultados muy positivos», según explicó el concejal de Seguridad del Ajuntament calvianer, Bartomeu Bonafé, quien señaló: «Debemos seguir igual porque si bajamos la guardia, en 15 días estas zonas volverán a ser una jungla».

Bonafé manifestó que esta temporada se ha incidido en erradicar la presencia de traficantes que se hacían pasar por vendedores ambulantes y la prostitución callejera. En este sentido, el Ajuntament elaboró en septiembre del año pasado una ordenanza municipal contra la prostitución. La ordenanza explica que cualquier actividad en la vía pública necesita la correspondiente licencia y considera la «captación de clientes como una actividad». Los agentes han expedientado a un gran número de mujeres por incumplir la ordenanza y diez de ellas han sido denunciadas en los juzgados no por prostitución, sino por «desobediencia a la autoridad», ya que han sido reincidentes.

Bonafé destacó que «aumentando la presión policial, casi han desaparecido los vendedores ambulantes de cadenas y joyas, pero que vendían droga, que era una de las principales quejas de los comerciantes». «Hemos insistido mucho en este tema y hay buenos resultados», agregó. Así, este verano se ha arrestado a 24 hombres -casi todos senegaleses o nigerianos- que se dedicaban a la venta de hachís, pastillas y cocaína con la excusa de la venta ambulante.

En Punta Ballena, cada noche, hay seis patrullas fijas de la Policía Local de Calvià y otra más en Ramon de Moncada, además de las que rotan por el municipio. «Tener a agentes aquí supone un gran esfuerzo económico para el Ajuntament, pero hemos logrado que casi no haya peleas y las que ha habido no han sido multitudinarias como pasaba antes», dijo Bonafé. Ultima Hora visitó la pasada madrugada Punta Ballena y Ramon de Moncada junto con el concejal y varios mandos policiales. «La gente que viene aquí sigue siendo la misma, pero al tener patrullas fijas se ha logrado reducir los problemas y los bares cumplen los horarios», explicó un mando policial. Durante la noche también se vio circular a algunas patrullas de la Guardia Civil.