Las brigadas del Ibanat se desplegaron por el pinar de Son Rapinya.Fotos: ALEJANDRO SEPÚLVEDA

TW
0

Faltaban pocos minutos para las cuatro de la tarde cuando una llamada telefónica de un vecino de Son Rapinya alertó de que un fuego se había declarado en una zona de pinar próxima a Son Muntaner, cerca de casas habitadas.

Los bomberos de Palma se desplazaron hasta esa dirección, acompañados de la Policía Local, y cuando estaban a punto de llegar descubrieron que se había iniciado un segundo fuego, a un kilómetro de distancia del primero. Ante la sospecha de que se tratara de un pirómano, y para que la situación no se les fuera de las manos, los funcionarios pidieron refuerzos y las brigadas del Ibanat (Instituto Balear de la Naturaleza), un helicóptero y un avión se sumaron a las tareas de extinción. El calor era intenso y en los pinares había rastrojos muy secos, por lo que las llamas se extendieron con gran rapidez. Un foco quedó ubicado cerca de la calle Mariano Carbonero, a pocos metros de las casas de Son Muntaner, y el otro en un pinar del Camí dels Reis, próximo a los colegios Madre Alberta y La Salle. Testimonios de los vecinos permitieron concretar que se habían iniciado con cinco minutos de diferencia, a una distancia de unos 500 metros uno del otro. Los técnicos del Ibanat expertos en investigar el origen de los incendios estudiaron los dos siniestros, que casi con toda seguridad fueron provocados por la misma persona, y la Policía Local dio una batida por los alrededores en busca de sospechosos, aunque la búsqueda fue infructuosa.