«Por saturación en la línea, rogamos vuelva a llamar pasados unos
minutos». Los teléfonos 902 de la Cruz Roja y de Unicef repetían
ayer al mediodía de forma incesante este mensaje, tan escueto como
esperanzador. Y es que los mallorquines se están volcando con las
donaciones a las organizaciones humanitarias que tratan de aliviar
el calvario del sudeste asiático. De momento, la ayuda económica de
particulares, fundaciones e instituciones asciende a 1.100.000
euros.
Desde la Cruz Roja de Palma se informó que en poco más de dos
semanas se han recaudado 303.000 euros de particulares de Balears:
«Es una respuesta magnífica, sólo comparable a la que hubo cuando
ocurrió el huracán Mitch, aunque esta vez la gente está más
concienciada», añadió uno de los voluntarios consultados. En la
Fundación Ferrer la respuesta isleña ha sido, hasta la fecha,
similar: «El dinero recogido suma 301.500 euros, y siguen llegando
donativos», contó Dolors, una de las responsables del centro de
Palma. «Además, hay que tener en cuenta que hay muchos ciudadanos
de las islas que han hecho sus donativos en oficinas de fuera de
Balears», agregó.
Bernardí Coll y Catalina Socies, el presidente y la gerente del
Fons Mallorquí de Solidaritat, también se mostraron gratamente
sorprendidos por la reacción de los isleños y anunciaron que ya han
recaudado 80.000 euros. Las instituciones también han aportado
fondos para los damnificados por el tsunami y desde el Govern
Balear se han entregado 150.000 euros. El Consell de Mallorca ha
donado 60.000 euros al Fons Mallorquí de Solidaritat y también
desde la mayoría de los ayuntamientos isleños se han sumado a esta
ola de solidaridad. Bombers sense Fronteres, Manos Unidas o Unicef
también están recogiendo miles de euros, aunque no se han
facilitado cifras concretas.
Cáritas y otras organizaciones religiosas se han volcado en la
ayuda a los supervivientes de la tragedia y además de dinero
enviarán ropa, artículos de primera necesidad y alimentos. Joan
Albert Segura, director técnico de Apotecaris Solidaris, confirmó
que se han almacenado una tonelada y media de artículos y
medicamentos de primera necesidad, que serán enviados a las zonas
más castigadas por el maremoto. Se trata de analgésicos,
antibióticos, pomadas, gasas y todo el material necesario para
montar un hospital de campaña, que será de inestimable ayuda en las
poblaciones devastadas. Mallorca, una vez más, ha vuelto a estar a
la altura de las circunstancias.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.